viernes, 24 de julio de 2009

AnNyoong a todos

Hoy terminó mi primera semana de clases y tengo la sensación de que aunque aún me pierdo la mayor parte de las conversaciones, una parte de mi cerebro comienza a pensar en inglés. Es más, anoche tuve un sueño, de lo más extraño por cierto, y creo tener la sensación de que fue in english. Poco a poco voy conociendo a cada uno de mis compañeros, todos asiáticos menos un chico que viene de Turquía y una brasilera, de San Pablo, que en realidad también desciende de chinos y es bastante callada. Todos me dan muchísima bola y me miran con sorpresa porque claro, ¡es tanta la diferencia! Les hago preguntas todo el tiempo, los hago hablar porque me encanta escucharlos y me hacen reir un montón con los comentarios que hacen entre ellos. Ya estoy aprendiendo algunas palabras en coreano: AnNyoong, que significa hola o GoMapSeupNida, gracias; y pronto voy a incursionar en el chino. Para la semana que viene tenemos que hacer una presentación en grupo y me toca trabajar con un amigo de China, otro de Corea y la brasilera. Va a ser muy gracioso.
Dick Bird es excelente profesor y aprovecho para darle charla un poco más acorde a nuestra mutua age.

Hoy estrené el gimnasio de la Uni., tengo 14 días free y voy a ver si los aprovecho. Después de una semana de no hacer nada, casi me muero.

Acabo de volver de la casa del hermano de mi homestay (uf, que largo). Todos son de Sudáfrica, y viven en Australia hace quince años. El hermano emigró primero y luego lo hicieron los padres y Pam. Vive en una casa espectacular muy cerca de donde estoy, y todos los viernes por la noche la familia (el hermano con su mujer y sus tres hijas, los padres y Pam) comparten una cena que es una manera de verse y también de compartir un breve momento religioso ya que es una familia judia. Todos me recibieron con mucho cariño, comimos riquísimo, sin ninguna formalidad y las sobrinas de Pam (11,9 y 5), que bailan y cantan, después de la cena nos hicieron un show. Verlas me hizo acordar muchísimo a Agus y Dolo cuando también nos hacían sentar como si estuviéramos en un teatro para que las viéramos hacer sus presentaciones... merde, qué pasa el tiempo! La mayor de estas niñas es buenísima y canta increible, por lo tanto fue un placer.

LA SIETE DE LA MAÑANA EN NICARAGUA...

Un mensaje tempranito, gracias Silvia y Cristina por sumarse. M.del C: calma y Mono: desde este blog viajero, buen viaje también!!